Silencio...


El silencio de la kajira puede ser dolor, angustia, pesar...

El silencio de la esclava puede esconder dolor y rencor...

El silencio esa veces agravio, es a veces angustia.

La vida agobia a veces, esa otra vida en la que se tiene que vivir un "sin-vivir".

Solo el Amo rompe ese silencio, cobija mi angustia, mece mi llanto.

Y bajo su amparo vuelvo a sonreír, feliz, segura, querida.

Que mi silencio solo se rompa con el dulce acorde de mis palabras esclavas.

Suya, Amo, en el dolor y en la alegría, siempre Suya.