En contadas ocasiones una esclava encuentra al amo de su vida y un hombre encuentra a la esclava de sus sueños. La esclavitud de una esclava querida (de pasión?) es una esclavitud inusualmente profunda. La kajira debe servir mucho mejor que cualquier otra esclava. Ninguna mujer estará más en poder de un hombre y con ninguna mujer un hombre será más duro. La esclava de pasión está dominada por su sumisión por el más fuerte de los vínculos, el amor, más fuerte todavía que el collar de su cuello. El amor en Gor no compra la indulgencia para una muchacha ni tampoco mitiga su esclavitud. La convierte en la más completa, la más indefensa y la más sumisa. Muchas esclavas de pasión son consideradas como las más entregadas de las esclavas.
(de las Costumbres Goreanas)