Soy afortunada, por ser Ud el Dueño de mis deseos y de mi entrega, pondré mi voluntad entera en ser siempre digna de Ud, de Su collar, servirlo con amor, honor y devocion, no como cualquier kajira, sino como la Suya.
Si a Ud le place el dolor, lo amare, lo convertire, si lo desea en camino hacia el placer.
Si a Ud le place la humillacion me sentire como una reina, entre mas envilecida y humillada.
Porque estar a Sus pies es el cielo,es la felicidad.